Fuera de la cocina
Marcadas por el destino, dos tristes y viejas cacerolas, yacían abandonadas a su suerte, adornando una vieja y decrépita ventana, ya no servían para cocinar, pero aun tenían su utilidad!
Marked by their fate, two sad and old saucepans, abandoned to their fate lay in an old, dilapidated window, no longer served for cooking, but still had their uses!
Cuantas cosas se cocinaron en ellas, reconfortando de calor los cuerpos!!!
Y aquí las ves, con resíduos de obra! un abrazo Silvia!
Otro grande feliz viernes!!!
La excelencia de lo rural.
Todavía se podian utilizar como tema de una bella composición fotográfica… como esta.
Saludos, Jacinto
Seguro que aun están ahí, desde que las fotografié, hace dos años. Un abrazo Leo!
¡Qué bonita composición! El vivo color de la piedra contrastado con el vivísimo color de esas cacerolas llenas de belleza en su ocaso. Has bordado la toma, Jacinto.
Esas cacerolas me enamoraron a primera vista ¡que maltratadas, las pobres! Un abrazo 🙂