La tradición oral nos ha regalado esta sabia frase que usamos para poner de manifiesto que no todos tenemos los mismos gustos y que nadie puede imponer los suyos. Hay tantas opiniones como colores existen. Y ¿Cuántos colores hay? Según Newton, eran siete, que son exactamente los que forman parte de un arcoíris. Pero la ciencia nos ha demostrado que son cientos de miles los que pueden surgir de las diferentes combinaciones de los llamados colores primarios: azul, rojo y verde. Por tanto, si como algunos defienden hay hasta billones de colores diferentes, también hay miles de millones de opiniones sobre el mejor color.

Pero hablando de colores, en fotografía el color es uno de los elementos fundamentales en la composición, de tal manera que al usarlo de diferentes formas podemos transformar el aspecto de una imagen, llamar la atención del observador, guiando su mirada a un punto determinado, ayudando a crear una conexión entre las personas y tus fotos.

Para adentrarnos en el papel primordial que el color juega en nuestras fotografías, empezaremos con unas cuantas nociones básicas sobre el color que te servirán para aprender a jugar con él.

Tono: Es el color propiamente dicho, utilizamos la palabra «color» en vez de tono, pero tienen el mismo significado.
Brillo o luminosidad: Es la claridad o la oscuridad de un tono
Saturación: es lo que hace que los colores sean más vivos o más apagados, hasta alcanzar los grises.
Círculo cromático: Es utilizado para clasificar los colores a partir de los tres colores primarios (en fotografía, el rojo, verde y azul), además de los complementarios (verde, naranja y violeta)

Por otra parte podemos mencionar los colores cálidos: Naranjas, amarillos, marrones, dorados, rojos… Los colores fríos: Verdes, azules, y violetas… los armónicos: Los colores que funcionan bien juntos, que se acompañan sin contraponerse o contrastar entre ellos. .




Contrastando colores en un fotografía podemos hacer que la imagen resulte más impactante y llamativa. En este caso hemos contrastado dos colores primarios.

Normalmente, un esquema de color monocromático sin colores que distraigan hace que se fije la atención en las texturas y los detalles. El escenario de la imagen es el desierto volcánico de Timanfaya (Lanzarote) donde un autocar transporta a los turistas. Añadiendo un detalle con un color opuesto, la imagen se convertirá en algo totalmente diferente. Estás rompiendo la armonía con un elemento que destaca y que llama la atención.


Las imágenes con contraste conceptual son más abstractas y subjetivas. Esto es porque están basadas en ideas. Las imágenes con este tipo de contraste tienen un componente de cuentahistorias. Puedes usar imágenes conceptuales contrastadas para subrayar la diferencia entre elementos.


La diferencia a través de las texturas es también una forma genial de crear contraste en fotografía. Puedes combinar elementos de textura áspera con otros de textura más suave para dar a la imagen un toque especial. Una forma sencilla de conseguir esto es usando el fondo. Si estás haciendo una fotografía de un elemento que tiene una textura bien diferenciada, puedes situarla delante de un fondo cuya textura haga contraste, como por ejemplo un fondo desenfocado.






En el ámbito urbano también podemos encontrar localizaciones interesantes con colores sólidos. A menudo descubrirás una pared con ladrillos rojos o un edificio moderno pintado con colores brillantes. Fíjate en señales de tráfico, coches, estatuas, escaparates… En cualquier lugar puedes encontrar el contraste de color.






Una de mis preferencias es crear imágenes donde el predominio total o casi total, sea un único color.





Contraste de color en la naturaleza
La naturaleza también nos brinda una oportunidad única para exponer todos los pares de colores complementarios de una manera natural, busca elementos que tengan ese tipo de combinaciones. Una mariquita en un campo verde, una orquídea amarilla y morada, hojas naranjas sobre el fondo azul del cielo, una rana con los ojos rojos, un loro con colores opuestos. Estate alerta ante cualquier oportunidad y ¡ten tu cámara siempre preparada!




El fotógrafo de paisaje tiene a su disposición en la naturaleza una riqueza pictórica infinita, saber combinar toda la paleta de colores que se nos ofrece, será quizás lo más complicado.
Tono, brillo, saturación…etc. Gracias por aportar conocimientos a los que como yo, no los teníamos. Mis fotos, sólo son lo que mi institución me dice, el ojo lo capta y la cámara de mi móvil, lo inmortaliza. La fotografía es un mundo apasionante, y si se trata de Naturaleza, para mí aún lo es más.
🍊💙👌🏻